Este es mi pequeño homenaje al Señor Teodoro Barrios , en un aniversario más de su retorno al Reino Celestial
El Señor Teodoro Barrios nació el 9 de noviembre de 1946 en la Colonia Elisa , Provincia del Chaco Argentino .en su infancia vivió con su padre en el paraje “ La Dificultad ”, trabajando en las tareas del campo y del obraje junto a su padre.
más tarde cuando es levantada la forestal del lugar , se trasladó a Colonias Unidas donde realizó los estudios primarios , para luego incorporarse a la Armada Argentina en donde allí realizó cursos de Enfermería dedicándose con empeño y sacrificio y con menciones honorificas se recibió de Enfermero Naval , luego por sus altas calificaciones lo incorporaron en el Buque de la Armada Nacional de Argentina , donde allí prestó servicios recorriendo así toda la Argentina y muchos otros países.
En 1974 se radica en Gral. J. San Martin, allí contrae matrimonio con la Sra. Irma Ríos y tienen dos hijos Germán y Marcelo
Gracias a sus conocimientos de varias disciplinas de enfermería, pudo crear un pequeño puesto de Primeros auxilios y de atención Primaria de salud ayudando con esto a las personas más humildes del lugar, teniendo siempre en contra la falta de recursos económicos y materiales pues no contaba con el apoyo de las autoridades sanitarias de la localidad por el hecho de no pertenecer a ningún partido político.
Luego pasa a trabajar en el Hospital Nacional “Félix A.Pértile”, a pesar de tener menciones honorificas como Enfermero Naval , sus inicios en el hospital fueron muy duros , se inicio de muy abajo pues le dieron un puesto de limpiador pero todo esto no hizo bajar la cabeza al Sr. Teo , cumpliendo siempre su trabajo con mucho esmero y responsabilidad.
Después de luchas constantes y superando las adversidades pudo incorporarse al Hospital en el área de Enfermería y Hemoterapia.
Sus inquietudes gremiales lo llevaron a ocuparse activamente de la problemática hospitalaria y fue durante estas actividades sindicales y movido por su preocupación social se volcó de lleno a prestar servicios en la Parroquia San Antonio de Padua , desempeñando diversos servicios pastorales y comunitarios, siempre en compañía de su Sra. Esposa , también formaron un grupo de Scout donde orientaban sobre los valores , el respeto a las personas y al medio ambiente , la solidaridad y la ayuda al prójimo todo esto dentro de un ambiente de cordialidad y compañerismo, organizaban actividades recreativas y campamentos en diferentes lugares de la zona y en ciudades vecinas.
Su constante expectativa y la realidad de los tiempos lo llevó a incursionar en el mundo de la literatura, escribir fue su mayor pasión, una vez que tomaba un lápiz y un papel se sumergía en ese fascínate universo de las letras en donde junto con los duendes y hadas de la imaginación, navegaban, volaban y caminaban por un mágico mundo de aventuras, recuerdos, sueños y anécdotas vividas
Escribió cuentos, novelas, poemas, su gran labor literaria fue merecedora de juicios auspiciosos, varias distinciones: Diplomas, trofeos, Premios, Reconocimientos.
Fue disertante en Bibliotecas e instituciones educativas.
Fue declarado “Huésped de Honor “de Ciudad de Colonias Unidas.
La Cámara de Diputados del Chaco le otorgo un merecido reconocimiento por su labor literaria desplegada a favor de la Cultura de la Provincia del Chaco.
He aquí un poema muy bello escrito por Don Teo Barrios
RETRATO ANTIGUO
Una Madre siempre está viva en el corazón del hijo. Siempre la tenemos con nosotros físicamente, o su alma nos acompaña, mientras que desde alguna antigua fotografía familiar nos sonríe con dulzura. Diría el poeta pensando en ese hijo.
Cuando más le mira
Ese cuadro vivo,
Más vuelven los tiempos,
Los gestos, los mismos
De esa madre ausente
Que se fue del siglo…
Cuando más le mira
Más se nota el brillo
Que tejen los ojos
Con tibios rocíos
Mientras fosforecen
Las reminiscencias
En torno a una foto
Y aun cirio encendido.
Cuando más él mira
Más busca el camino
Por donde llegarse
Hasta el cielo mismo
Con sus rosas purpuras
Con sus blancos lirios…
Cuando más se miran
Y callan los trinos
Florecen las lágrimas
Del hombre, del hijo
Que ama a esa madre
Que hacia Dios se ha ido..
Cuando más él mira
La foto, esos lirios
Las rosas de octubre
Y el cirio prendido,
Más recuerdos vienen
Más se vuelve un niño
Mientras mira y mira:
El “Retrato Antiguo”
Este es un cuento muy especial y significativo
LOS SENDEROS DEL
La carreta era pesada y yo estaba perdido. Numerosos e interminables caminos se abrían antes mis ojos y no sabía cuál de ellos sería aquél que me conduciría hacia el perdón del muchacho.
Una mujer joven y elegante estaba parada en la orilla de uno de esos pasajes. Me miraba fijamente y su rostro denotaba tristeza y cansancio. De repente, inclinando su rostro se arrodilló, junto sus blancas manos y comenzó a rezar.
Yo estaba desesperado. A mi lado, sentado en el duro tablón que hacía de asiento del carro me acompañaba un anciano barbado y reflexivo.
-Toma aquél camino-me dijo –
Pero, al comenzar el carruaje su lento peregrinar no hice caso de esa indicación y opté por otro .La marcha fue penosa.
Llegamos a una desértica y fría hondonada. Los glaciares del siglo mostraban sus afiladas cuchillas y la humanidad cabizbaja y triste avanzaba entre ellas peligrosamente.
Mi acompañante tenía razón. Mi terquedad había tomado un rumbo equivocado.
Me indicó esta vez los albores del día encaminamos hacia allá .Avanzamos muy lentamente hacia la esperanza. Al llegar a un recodo, vimos a un grupo de personas que estaban acampando orilla de la senda y nos detuvimos a preguntar si habían visto pasar por allí a un joven vestido de negro con una alforja blanca echada sobre sus hombros.
Nos dijeron que no.
Pregunté si era esté el camino que nos conducía hacia la salida de mi conflictivo laberinto y me dijeron que no sabían. Que solamente ellos podrían indicarnos desde allí, una imagen, una visión fugaz de un lejano torreón cuya cúspide, al ser besadas por los vientos de la vida , hacían repicar el campanario del amor y la verdad.
Pero nos advirtieron que también allí , en se lugar, habían senderos indefinidos y apretujados. El peregrino debía tener cuidado al optar por uno de ellos.
A la pregunta, si distinguían cuál de ellos desembocaban en la puerta más ancha del torreón, nos dijeron que no sabían.
El anciano barbado, fijó su profunda mirada celeste en la lejanía del escarpado horizonte y habló. Me indicó el rumbo.
Apresuré, desde el chasquido del látigo en el aire, la marcha de mis sudorosos y enflaquecidos caballos.
La carreta reinició el rodar a través de un empinado y florecido costal de una colina. A nuestros pasos se sumaron desconocidos habitantes de la región.
Atrás, al darme vuelta para agradecer la cordialidad del grupo, volví a ver a la extraña y bellísima mujer que seguía de rodilla rezando en el andeon de los tiempos.
De repente algo ocurrió en los azules espacios del cosmo.
Todo se volvió nebuloso y oscuro. Las aves del universo dejaron de cantar y aquellos que nos acompañaban desaparecieron del abrupto lugar. El sendero, a medida que ascendíamos hacia el sitio donde estaba el alcázar, se iba enangostando.
No sé cuánto tiempo más avanzamos hacia ese estoico destino.
Por fin llegamos. Un agradable y sublime resplandor iluminó los contornos del pórtico de la abadía celestial. Pero ¡Oh sorpresa….! El mismo era tan agosto que para acceder al interior de la imponente mansión había que pasar de a uno por vez.
Había que dejar a un costado de la ruta al pesado carruaje con sus bártulos terreno.
Y fue ese el momento. Al cruzar el dintel de la delgada puerta, repicaron las campanas y lo vi. Allí estaba él, el joven a quien buscaba. Estaba junto a otra persona, era el mismo anciano que segundo antes había estado conmigo. Mi muchacho lloraba en silencio. Lo llamee pero no me escuchó. Apresuré los pasos para llegar hasta él pero algo sacudió mi espíritu.
Desperté agitado y con los ojos humedecidos por las lágrimas. Pensé un segundo en la realidad que me afligía y recé. Pedí perdón al Buen Pastor. Porque en mis desvelos mundanos, en lo cotidiano, seguía siendo la gruñona y desorientada oveja de su redil.
“…. Esa, noche, por emociones abruptas y humanas que no supe manejar, había herido. Había discutido y agredido verbalmente al más joven de mis hijos. Aunque luego me arrepentí y le pedí perdón, el dolor del alma se había ido conmigo a la cama hostigando con avidez las profundidades del sueño que llamaba a mi paterna reflexión de cada día…”
Señor Teo:
Al recordar un año más de su partida al Reino Celestial , le he brindado este pequeño tributo en su memoria .
Le cuento que yo no tuve ni tengo la suerte de contar con un padre , es mas ni lo conozco , pero me hubiera gustado haber tenido un padre como usted.
Lastimosamente no he tenido la dicha de conocerlo en persona, pero si lo he conocido a través de su linda familia Dios me ha dado la dicha de poder conocerla y compartir con ella , y a través de ella conocerlo a usted , me hablaron de sus actos , sus vivencias , sus experiencias de vida ya sean estas buenas , malas , alegres o tristes y quiero que sepa que de cada relato he aprendido algo , se que fue un hombre noble y de gran corazón , estoy segura que muchas personas lo recuerdan con mucho cariño y que aun lamentan su partida.
Fue un maravilloso esposo-compañero-amigo, eso lo he notado en la Sra. Irma que al recordarlo y al hablar de usted los ojos se le tiñen de nostalgia y de mucho amor.
“de un buen árbol sale buena madera” , ese buen árbol es usted pues ha sido un buen padre , ha formado buenos hijos , se que desde el cielo usted está orgulloso de ellos .
Sé que en la vida nada le ha sido fácil , ha pasado por mucho , aun así usted nunca se dio por vencido y siguió para adelante , teniendo siempre como base fundamental su fe en Dios.
Usted se encuentra en el Cielo en compañía de Dios Nuestro Señor yo quiero darle las Gracias a Dios a través de usted , Por todo lo que me ha dado y me da día a día, Gracias por la Vida que tengo , Gracias por mi hijo, y por mi familia , Gracias por mi trabajo , Por la salud , Gracias por mis amigos , Gracias por estar siempre presente en mi vida aunque yo a veces lo tenga muy abandonado , gracias por haberme permitido conocer a la Familia Barrios , a su esposa la Sra. Irma y a sus hijos Germán y Marcelo son personas muy importantes para mí y los quiero muchísimo , por favor dele Gracias por Todo.
Señor Teo mediante su intersección quiero elevar una oración al cielo y pedir a Dios por las necesidades espirituales y materiales de nuestros hermanos más necesitados, pedirle que por fa siempre me de fuerzas para poder seguir adelante y no caer , pedirle para que me ayude a ser una buena madre para Nicolás y que el sea un hombre de bien .
Quiero pedirle por su Familia , por la Sra. Irma para que siempre tenga salud y fuerzas para seguir adelante , ella es un ejemplo de esposa , madre y mujer luchadora digna de imitar, por su hijo Marcelo que Dios lo ilumine y lo ayude a ser una persona, un buen padre para sus Hijos Mica, Brisa ,Luciano y la pequeña BB, ilumínalo Dios ayúdalo siempre con tu luz, te pido especialmente por Mica se que está en una edad difícil por fa ayúdala y guíala por el camino del bien a no caer en tentaciones .
Te pido por mi gran amigo Germán, cuídalo siempre Señor, tu sabes que lo quiero y aprecio mucho, ilumínalo siempre con tu luz, dale fuerzas para que pueda trabajar siempre con ahínco y responsabilidad, también te pido que lo ayudes a que pueda realizar su sueño anhelado de estar con su novia María José , ambos se quieren mucho, Dios ayúdalos a vencer las dificultades y así poder realizar definitivamente ese amor, bendícelos siempre .
Señor Teo :
en este día muy especial elevare más fuerte mis oraciones al Señor por su alma para que se llene de Gozo en el Cielo en compañía de su querida Madre y de todos los Ángeles del Cielo… Amen
Se que le gustaban las Rosas Blancas , estas son para usted ...
